domingo, 27 de mayo de 2012

Decir y hacer en la democracia que no se ve

Decir y hacer en la democracia que no se ve ( El Periódico de Aragón - 26/05/2012 )


Decía el otro día el Ministro Wert que la cantinela de que haya familias que no podrán pagar las tasas universitarias, no responde tanto a que no tengan recursos sino a que los dedican a otra cosa. Un, dos, tres responda otra vez: a comer, por ejemplo. Esa mala costumbre. Le faltó decir que en España comemos por encima de nuestras posibilidades.
Hablando de declaraciones subversivas, Esperanza Aguirre, el pasado 22 de mayo, cuando la ciudadanía salió a la calle en defensa de la educación, pergeñó una burda estrategia de despiste con la absurda polémica de que habría que suspender la final de la Copa del Rey si había pitos a la Corona. No se puede permitir eso en un acto de "afirmación nacional". Fundido a negro de los temas del déficit, de Bankia, de la subida del transporte público y los recortes. Ponemos el foco en el circo y desviamos la atención. El cuarto mayor banco del país necesita al menos 12.000 millones, un 20% más del recorte en educación y sanidad y nosotros salimos a la calle montando algaradas que flaco favor le hacen a la marca España. Antipatriota es aquella persona que sale a la calle o pita contra el rey pero no aquellos que destrozan el sistema de bienestar.
De coronas y patriotas. El Gobierno excluye a la casa real de la Ley de transparencia. A ver si nos habíamos creído que los súbditos podemos entrar como un elefante en una cacharrería en los dineros de palacio. Perdón, he dicho elefante. El PP y el PSOE (¿socialista y obrero?) descartan reducir la asignación a la familia real. La dotación, 8,26 millones, un 2% menos que en 2011. El recorte en educación será de más de 3.000 millones, un 21% menos que el año anterior. Por la regla de tres de Wert, no es que no haya recursos, es que se dedican a unas cosas en perjuicio de otras. ¿Ven ustedes lo peligrosa que puede llegar a ser la educación? Una aprende a hacer reglas de Wert. Mejor dejar morir de inanición a la educación, tener una ciudadanía domesticada, sin espíritu crítico y que no cuestione cómo se emplean los recursos.
Recursos. Rouco Varela amenazó con que si se obligaba a la Iglesia a pagar el impuesto de bienes inmuebles, se resentirían algunas de las actividades que realiza la Iglesia. Por ejemplo, la dotación a Cáritas. Es curioso que lo que menciona Rouco sea precisamente eso, cuando del presupuesto de Cáritas, sólo un 1% proviene de las aportaciones de la Iglesia.
Iglesia. La Iglesia, según el BOE de 31 de diciembre de 2011, tiene un presupuesto para 2012 de 13.266.216,12 euros de aportación mensual del Estado. Lo que supone más de 437.000 euros al día. Y un total anual de 159 millones de euros. Esto para unos tiempos y en un país donde Unicef ha cifrado que hay 2.200.000 niños, el 26% del total, que viven bajo el umbral de la pobreza. De nuevo la regla de Wert y hacia donde se dirigen los recursos. Será que la caridad cristiana entiende más de IBI que de umbrales de pobreza.
Escribe Javier Pérez Andújar en el libro Paseos con mi madre que "la democracia es algo que se ve y se toca, y donde no se percibe es que no la hay". Pues eso.

sábado, 19 de mayo de 2012

Presentando a Santiago Auserón y su libro "Canciones de Juan Perro"


Presentación del libro "Canciones de Juan Perro" de Santiago Auserón. Editorial Salto de Página, 2012.

Que atrevida es la ignorancia, me decía a mi misma, después de decirle que sí a la propuesta de Paco Goyanes y de la Librería Cálamo para presentar el libro de Santiago Auserón "Canciones de Juan Perro". De un lado, el honor de poder acompañar a un mito, de otro, el vértigo de hacerlo. Y hacerlo sin ser una experta ni en música, ni en poesía. En la presentación del libro en Madrid, Santiago estuvo acompañado por Jenaro Talents, Jose Luis Pardo y Diego A. Manrique. En Zaragoza Santiago no tuvo tanta suerte, sólo me tuvo a mi. Para compensar el desequilibrio, muchos de sus paisanos se acercaron para arroparle en la presentación. Santiago estuvo soberbio, desplegando toda su grandeza y haciéndonos pasar unos momentos mágicos. 

Gracias a la Librería Cálamo por darme la oportunidad de pasar un rato con Santiago. A Santiago por su generosidad y genialidad. Después de la presentación escribí un tuit sobre la satisfacción que da el conocer a un ARTISTA, en mayúsculas. Es muy frustrante que la admiración que tienes hacia alguien se esbafe cuando tocas a la persona. Con Santiago no pasa eso. Si su creación y su personaje te atrapa, él, Santiago Auserón, te conquista para siempre. Gracias por las palabras que nos dedicaste ayer a los que tuvimos la suerte de escucharlas y gracias por las que le dedicaste a mi persona. Si el atreverse tiene estas recompensas, bendita ignorancia la mía. 


Estas son algunas líneas que preparé para presentar a Santiago. Antes de leerlas pedí disculpas al propio Santiago y al público asistente. Presentar a alguien como Santiago Auserón intimida, porque supone hablar de la historia musical de este país teniendo al lado a esa historia y sabiendo que todo lo que puedes decir sólo van a llegar a ser retales que quizá no hayan sido bien escogidos ni bien expuestos. Y porque además, una figura como Santiago tiene un simbolismo particular para cada una de nuestras historias personales que no se pueden llegar a recoger al hablar sólo desde una voz, la mía. 

Tal y como lo presenta la Editorial Salto de Página en la solapa del libro:

Santiago Auserón (Zaragoza, 1954), estudió Filosofía y Letras en la Universidad Complutense de Madrid y en la Université de Vincennes, París VIII, bajo la dirección de Gilles Deleuze. Fue cantante y compositor de Radio Futura, reconocido como mejor grupo musical español de las últimas décadas. Investigó las raíces del son cubano, produjo la recopilación Semilla del Son (1991) y la Antología de Francisco Repilado, Company Segundo (1996). Es autor de los libros La imagen sonora (Episteme, 1998), Canciones de Radio Futura (Pre-Textos, 1999), y de numerosos artículos sobre música, arte y pensamiento. Ha traducido los libros La ciudad infinita (Pre-textos, 1992) y El árbol ausente (Demipage, 2009), de Catherine François. Bajo el nombre de Juan Perro ha publicado cinco álbumes de canciones entre 1995 y 2011. Premio Max de las Artes Escénicas, 2001. Medalla de Oro Santa Isabel de Portugal, Zaragoza, 2002. Premio Trovador del Ayuntamiento de Alcañiz, 2007. Premio del Ayuntamiento de Montilla, 2009. Premio Nacional de Músicas Actuales del Ministerio de Cultura, 2011.

Para mí Santiago Auserón representa una brecha en la cultura de la transición (ahora que precisamente ha salido el libro CT o Cultura de la Transición, crítica a 25 años de cultura española). A lo que alude este concepto es a una cultura hegemónica que no permitía cuestionar ciertas cosas y que sometía a la propia cultura y al pensamiento a los marcos establecidos, uno de ellos el dominio del mercado. Santiago ya rompió esta prisión intelectual con la disolución en 1992 de Radio Futura en pleno éxito masivo y mediático.
 
Porque Santiago es un pescador obstinado por encontrar algo que no se ha dejado llevar por la corriente ni ha sucumbido a los cantos de sirena del éxito fácil y comercial. Porque un filósofo no puede pensar en términos monetarios y Santiago no ha querido crear desde dentro de la jaula del mercado.
La transgresión sin imposturas, la libertad, la búsqueda, la investigación y la curiosidad es lo que han marcado su creación.

Dejamos de lado a Santiago y pasamos a hablar de Juan Perro.

Podemos decir que Juan Perro es una ficción de Santiago que toma prestado su cuerpo y su voz para hacerse real en un escenario. Puede ser una burla esquizoide de un espectacularizado y esquizofrénico mundo. En palabras de Santiago, es una máscara o un personaje de cómic. Es un contador de historias que radiografía la vida. Un observador de lo cotidiano. Un ladrador comprometido. Un trotamundos de suelas gastadas que sigue teniendo ganas de andar. Un fantasma que te roba tus adentros y te los devuelve convertidos en canciones. Un hacedor de letras “con apariencia de trovador gallego, de humanista negro granadino, de baile y máscara de entremés” como el mismo Santiago define en el libro.

Juan Perro es la marca con la que Santiago Auserón ha vagabundeado por el universo musical en los últimos años y bajo la que ha creado los discos:
Raíces al viento (1995)
La huella sonora (1997)
Mr Hambre (2000)
Cantares de vela (2002)
Río Negro (2011)

Los versos de las canciones de estos cinco discos más otros textos inéditos son los que conforman el libro “Canciones de Juan Perro”

¿Qué nos encontramos en este libro?

Un poemario con las letras de los temas que han marcado sus 20 años de carrera musical en solitario. Palabras que nos aparecen en la lectura desnudas de música pero no de sonoridad ni ritmo.

De alguna manera, al escuchar las canciones de Juan Perro, interiorizas, haces tuyas, las palabras que te vienen de fuera. Leerlas para mí, ha sido sacarlas como si de un exorcismo se tratara y verlas reflejadas en los escrito. Si las letras de Juan Perro al escucharlas en su voz, te acarician, al leerlas te sacuden por dentro.

¿De qué hablan las canciones-poemas de Juan Perro?

Este libro es un badulaque delicatesen que nos ofrece perrerías selectas.

Nos habla de perdedores. Del fracaso. De artistas y del descaro.
De personas que te cobijan y de cuerpos donde quedarse a dormir una noche.
De almas gastadas, de malos rumbos.
De heridas, de secretos, de rumores y de mentiras.
De ansiedades y desvelos. De huídas y de errores.
De bares, de tragos, de la risa, el baile y las madrugadas que no acaban.
De búsquedas. De salirse de lo marcado y de pajaritos de alas rotas.
De los despojos de la memoria. De cuentas y de saldarlas.
De la calle, de fantasmas , de negocios y de imposturas.
De océanos y orillas. De costas hostiles.
De cantos que terminan en aullidos.
De miradas al margen que se merecerían cuadernos enteros.
De mundos que arden. De perros acosados. De interiores que queman.
De ficciones y realidades. De la mala fama.
De espinas y de raíces.
De los dueños del asfalto.
De las grietas de los adentros y de lo que se nos cuela por ellas.
Del humor como arma de resistencia.
De todo esto y mucho más nos habla el libro porque cada lectura te regala un nuevo algo que antes se te había pasado desapercibido.



Después de este texto, abrimos un diálogo donde Santiago escuchaba y esculpía palabras que nos iban tocando de cerca. Hay segundos que son mucho más que segundos. Son los segundos olímpicos. Estar un rato con Santiago Auserón es uno de esos momentos que colocas en las estanterías de lo especial. Gracias por este tiempo. 

Juan Perro recitándose a sí mismo, grabado por Saúl Esclarín: http://soundcloud.com/saul-esclarin/juan-perro-recitando 

La página web de Santiago Auserón: http://www.lahuellasonora.com/ 

Editorial Salto de Página: http://www.saltodepagina.com/

Librería Cálamo: http://libreriacalamo.com/

Tertulia Despierta Aragón del 17 de mayo 2012

Análisis de la actualidad económica en la Tertulia de Despierta Aragón - Tertulias de "Despierta Aragón" - Información y servicio público - Podcasts y Audios - Aragón Radio 2 -

domingo, 13 de mayo de 2012

#12M15M , tocar el mundo que se imagina.


En la búsqueda de una democracia real, muchas personas saldrán hoy a la calle impulsadas por el 15M. Algunas voces que cuestionan su impacto obvian uno de los méritos más importantes de este movimiento, la generación de una atmósfera crítica y el trabajo, más alejado de los focos, que lleva realizando durante todo este año.
Han surgido bancos del tiempo, se ha impulsado el movimiento Stop Desahucios, se han desarrollado tsunamis de implicación social en la defensa de lo público como las mareas verde (enseñanza), la azul (contra la privatización del agua), la violeta (contra los recortes en igualdad y las reformas del PP en la Ley del aborto), la roja (por los derechos de las personas desempleadas), o la blanca (sanidad). Se ha trabajado de manera constante en las asambleas de barrio, han surgido brigadas para frenar operaciones policiales contra inmigrantes, ha nacido el observatorio de los derechos económicos, sociales y culturales, o iniciativas de autofinanciación para hacer frente a los bancos. Se han puesto en marcha cooperativas, proyectos colaborativos, dinámicas de intercambio, escuelas populares, incluso hay barrios que plantean crear su propia moneda.
Y se han generado discursos, sobre la defensa del procomún, sobre la ética del cuidado o la insumisión tributaria. Se han propuesto nuevas fórmulas de producción de contenidos y la financiación colectiva de proyectos. Se ha debatido sobre la cultura libre, la renta básica, la autogestión comunitaria, sobre la transparencia, el decrecimiento, la gobernabilidad, el reparto de la riqueza, etc.
Si esto no es política, que baje Aristóteles y lo vea. El que no haya un proyecto político detrás del 15-M es porque no puede jugar en un sistema en el que no cabe.
Guillem Martínez acuñó el término Cultura de la Transición para referirse a la cultura hegemónica que ha dominado el espacio político desde entonces. Como expresa Amador Fernández-Savater, impone ya de entrada los límites de lo posible: la democracia-capitalismo es el único marco admisible de convivencia y organización de lo común. El 15-M supone una brecha en esta cultura consensual porque toca los dos pilares que hasta ahora eran intocables, el sistema de partidos y el mercado. Los intentos del poder en asignarle una identidad es darle un lugar en el tablero para volverlo gobernable.
De ahí la necesaria indefinición del #15m. Es un sentimiento colectivo que ha logrado despertar y conectar conciencias. La realidad hoy es una ficción fragmentada compuesta por átomos independientes que se mueven, interaccionan horizontalmente y que no se pueden someter a estructuras identitarias unívocas.
El 15m pretende cambiar el tablero, no sustituir un mundo por otro sino, como dice Amador Fernández-Savater, recrear el único mundo que hay contra los que lo estropean. De ahí que muchas personas prefieran ser llamados ilusionados que indignados.
Ilusionarse es tener un algo que tocar que mientras no lo abrazas, está ahí estorbando. No hay freno, lo que se ha imaginado deambula por el aire. Por eso yo salgo hoy a la calle. Para intentar tocarlo.
Referencias #12M15M