domingo, 27 de abril de 2014

Un planeta irrompible

Un planeta irrompible ( El Periódico de Aragón - 26/04/2014 )

La historia sucede a retales que se superponen uno encima de otro, de tal forma que en un mismo trozo de patria hay varias capas de sucesos. Como si lo que ha pasado en nuestros lugares fuera una tarta de hojaldre o una torre de libros apilados, vemos la superficie de arriba pero no el relleno. Así, las tradiciones que se han ido poniendo en la parte superior son las que se quedan como pedazos de nuestra historia. Lo de menos es que en otros momentos la costumbre fuera la contraria. Lo importante es agarrarse bien fuerte a un jirón dominante del relato para pertenecer a algo. A mí nuestro pasado no me representa pero es muy jodido sentirse afrancesada en Torrero. ¿Cuántos años hacen falta para que una tradición se vuelva incuestionable? De siempre he tenido una oreja con una pequeña dentellada. De cría mi madre me bromeaba diciendo que era porque a mí me recogieron de un contenedor de basura y una rata me había mordido. Durante una temporada de esa travesía a la que se le llama niñez me dio por pensar que yo era adoptada. Sentía que era la llave de un cuarto cerrado en el que mis padres habían almacenado sus secretos, así que dediqué todas mis energías a derribar puertas. De la misma manera que me escondía en un rincón oculto imposible de encontrar para luego gritar ¡estoy aquí!, también aprendí a cobijarme en mis silencios voceras, ¡déjame sola que me estoy contando un secreto! Era una táctica para trocear el misterio y repartirlo en miguicas. Mi madre se hartó de que le fueran con la fantasía de mi adopción y me dijo que si yo fuera adoptada, me habrían devuelto. Ese argumento me pareció contundente para dejar de pensar que la biología me hacía pertenecer a otra parte. Los secretos son los cromos de nuestra infancia, los intercambiamos para construir con ellos los cimientos de la vida en común. Dice Ignacio Martínez de Pisón en su última novela "todo secreto genera nuevos secretos". Se dice guardar el secreto como si el cuerpo fuera una consigna en la que abandonar un huevo. Ha aparecido un nuevo planeta habitable similar a la Tierra, Kepler-186f. Lo podemos edificar a base de todo lo que una persona no se cuestiona: tradiciones y secretos. Tenemos mucho material. Es inflamable pero resistente. Aguanta reuniones familiares, promesas electorales, mezquindades, dictámenes de jurados de premios literarios, eufemismos, relaciones de pareja y cuotas de audiencia de las frivolidades que nunca se ven en esta casa. Las tradiciones y los secretos están para ser demolidos, no para construir planetas. Ejem. Prueba a resistirte con todo todo tu cuerpo ateo a la Mona de Pascua de mi pueblo. Igual de fuerte que el picor de las ortigas, el aroma a aceite de las almazaras y el abrazo de mi madre. Desisto de impugnar la tradición y me relamo en esos amarres cantando La Bien Querida,"Y luego me he ido/ y me han venido de golpe/ las cosas que te hubiera dicho/ las cosas que nunca te digo/ porque siempre me pasa lo mismo".

martes, 22 de abril de 2014

Día del Libro

Que si es un acto de exaltación del capitalismo, que si ay del bocao que lo comercial le arrea a lo literario, que si la frivolidad, que si es mero negocio, que si simplemente lo que se homenajea es el consumismo, que si leer para qué, que si es un artificio de las grandes superficies, que a la lectura ni se la saca a pasear, que si mi dignidad lectora está por encima de un ruin evento mercantilista, que si es una excusa para lucir los egos de los autores, que si la industria del libro agoniza, que si la cultura es otra cosa, que si yo no me dejo engañar por las grandes editoriales, que si la crítica literaria es como un Facebook lleno de 'Me gusta' en el que no se puede llevar la contraria, que si los poetas malditos juegan al tú la llevas, que si la envidia, que si el desprecio, que si vivan las nuevas voces mientras sean sólo yo y mis amigos, que si a esta autora nueva que brota hay que abandonarla para que se agoste, que si no me gusta este autor aunque nunca lo he leído, que si el mercadeo ensucia mi espíritu lector... Pereza, enorme pereza me da todo esto, tanta que ni me ocupo a dar lecciones ni discursos. Mañana es el Día del Libro, que lo disfrute quien quiera sin la necesidad de "brasear" al personal. Yo estaré de librera, un trabajo del que estoy enamorada aunque mañana acabe el día con más cansancio que amor. Estaré, por tanto, disfrutando del día, de la literatura, de la escritura, de la lectura... del oficio. Y eso, para mí, es importante.





Presentación de Piticascas en Pina


domingo, 13 de abril de 2014

La superstición de la paloma

La superstición de la paloma ( El Periódico de Aragón - 12/04/2014 )

La unidad mínima en la construcción de confianza es el discurso. A partir de esta molécula se puede edificar lo demás; relaciones, hospitales, mentiras, depuradoras, risas, libros, vacunas, croquetas. Una partícula pequeña de predicamento genera la energía suficiente para que la confianza se fije como argamasa y permita que el mundo se levante ahí encima. Por eso nos gusta tanto la figura del pregonero, necesitamos que alguien nos inocule confianza aunque sea para emborracharnos en las fiestas populares. Es una especie de venia. El otro día estuve escuchando a Enrique Vila-Matas que vino a presentar su última novela. Dijo muchas cosas interesantes y luego otra que es la que yo retuve. Un editor suyo quiso llevarle a ver uno de los lugares que más le fascinaban, la desembocadura del Duero. Intentó contagiar al escritor la pasión que él sentía por ese paraje. Allí mismo, mientras el editor iba narrando su adoración por ese sitio, Vila-Matas sucumbió a la belleza. Contó que realmente la bruma impedía que se viera nada pero que él se imaginó bellísimo ese paisaje. No importa que no tuviera la vista porque tenía el relato. Confió en el discurso de su amigo para dejarse llevar por lo sublime. Pienso en esto y también en la superstición de la paloma, un experimento clásico desarrollado por Skinner, psicólogo e investigador del conductismo. Se mete una paloma en una caja. Un temporizador acciona la apertura de un comedero pero la paloma creerá que lo activa ella con su comportamiento, así que repetirá el último gesto que estaba haciendo antes de que apareciera la comida. Por eso se le llamó supersticiosa. La respuesta realizada antes del refuerzo de la comida se ve reforzada por la recompensa. Y lo de menos es que este discurso fuera un acto de fe y que esté trazado con unas conexiones accidentales al azar. Las consecuencias favorables son suficientes para mantener una pauta aunque esta no tenga efectos sobre la suerte de los sujetos. Así pasa en el comportamiento humano. Se acepta lo falso con tal de creer en algo. Quizás por eso permitimos que nuestras plazas estén llenas de palomas, porque somos más de supercherías que de razones. El timo de la estampita está de moda, incluso fuera de la política. "El mundo estaba envuelto en gasa; veía la forma de las cosas pero no con suficiente claridad". Esto dice Chimamanda Ngozi Adichie en Americanah. Y ahí estoy yo, entre la caja de Skinner, la bruma de Vila-Matas y la gasa de Chimamanda. Hemos protestado por los recortes de derechos y servicios pero la vida seguía en los discursos que cada cual se construía para poder seguir confiando en vivir. Si unos se quedaban fuera de la sanidad, se unen fuerzas para asistirles pero si se cierran hospitales, ¿qué hacemos? Nos cercaron accesos e hicimos piquetes. En el experimento de ahora destruyen nuestros refugios directamente. La confianza es una neblina y el discurso de lo aprendido sólo me permite desgastarme moviendo inútilmente las alas.

viernes, 11 de abril de 2014

Taller 'Y contaron felices y leyeron perdices' en colonia Menudas Artes.


La próxima semana, durante los días 14, 15 y 16 de abril, tendrá lugar la colonia urbana Menudas Artes, una propuesta creativa y original para que los peques pasen sus vacaciones disfrutando de la creación musical, artística y literaria. Está organizada por IDEAS A MARES y servidora junto con Ana Quintana, estaremos a cargo del taller "Y contaron felices y leyeron perdices" en el que acabaremos creando un cuento con los asistentes.

La información completa de las colonias aquí: http://www.menudasartes.com

Agradezco mucho a Mercedes Ventura y María Jesús Serrano, las Ideas a Mares, su empeño por sacar adelante propuestas creativas y cuidadas, el cariño con el que tratan lo que hacen y la apuesta por contar con gente como yo. Gracias.

jueves, 10 de abril de 2014

Participación en la mesa "Experiencias para una ciudad emocional".


Esta tarde, a las 19 horas en Zaragoza Activa y dentro del programa de charlas-debate #ThinkZAC, participaré en una mesa para hablar de ciudades emocionales junto con Óscar M. Sarok (@sarok) y Nati Buil (@danzatrayectos). La información del evento aquí: http://www.zaragoza.es/zac/events/20491

Voy a estar con amigos a los que aprecio y admiro. Óscar ha investigado y trabajado mucho sobre el concepto de ciudad emocional y Nati practica la ciudad emocional con cada edición de Trayectos. Así que yo, que no sé tanto como ellos, sólo se me ha ocurrido hablar del tema a través de la literatura. Me serviré del libro de Javier Pérez Andújar, Paseos con mi madre para pasear con mi abuelo y narrar mi propia cartografía emocional. Aquí dejo el álbum en el que me basaré para hablar esta tarde.






Gracias a José Ramón Insa,@culturpunk, por invitarme a este rato de charrada.