No sé escribir bonito. Me falta talento y me sobra violencia. La ponzoña se me queda dentro y escribo vomitando las entrañas. Dejo que sean las palabras las que sufran las úlceras. Intestinos, criadillas, manos, callos, sangre, higadillos, pescuezos, alones, mollejas, madrecillas. Menuceles. A mi abuelo le encantan, quizás por eso no se atraganta con mis textos. Vivir una guerra te hace el estómago fuerte. Aunque la virulencia de este mundo haga que al mirarlo se te canse la vista.
"La gente era tan pobre que lo único que tenía era la primera persona". Dice Javier Pérez Andújar en uno de sus últimos artículos. Leo Últimos días en el puesto del Este, un libro que Cristina Fallarás escribe desde un estado de sitio. El suyo y el nuestro. La furia de unas letras amotinadas en una casa mirando al hambre y al desahucio. Urdangarín y la poca vergüenza. "Ser mujer y encima rubia, complica aún más las cosas". Corinna es un nombre de vedette con lentejuelas y hombreras. Con tanta cortina de humo, una no sabe en qué lugar se nos ha quedado el fuego. La familia real aparenta normalidad. Para eso que se vayan a una oficina del paro que por común, es lo normal. Yo voy habitualmente a una de ellas, es lo que tenemos las paradas, somos así de morbosas. ¿Ha entrado usted últimamente en una? Hacerlo supone una inmersión en sociopolítica de la que se te queda agarrada al estómago. Yo hago de tripas corazón y se me sale por los latidos toda la rabia. La miseria es tener que competir entre pobres a ver quien tiene la tragedia más grande. Me encuentro con una amiga. Ella y su hijo son pobres como yo pero más. Ese es mi análisis. Ella está muy delgada. Su hijo se ha quedado sin juguetes porque su madre los ha vendido de segunda mano. Yo así a lo tonto, voy sobreviviendo. Yo delante de mí sólo tengo el abismo, me dice. Me estoy "candelapeñizando", digo yo de mí, pero es difícil no ponerse tremendista cuando la desesperación tiene una conversación contigo mirándote a los ojos. Violencia.Bárcenas. "La indemnización que se pactó fue en diferido y como fue una indemnización en diferido, en forma efectivamente de simulación-, de simulación o de lo que hubiera sido en partes de una- de lo que antes era una retribución, tenia que tener la retención a la Seguridad Social, es que si no hubiera sido-, ahora se habla mucho de pagos que no tienen retenciones a la Seguridad Social ¿verdad? Pues aquí se quiso hacer como hay que hacerlo, es decir con la retención a la Seguridad Social". Declaraciones de Cospedal, que retuerce tanto lo que dice que exhala violencia. Como la de prohibir que se diga desahucio por ser demasiado contundente. Contundente es lo impúdico de dejar a la gente sin casa. Lo que prohibís, se me hace irresistible. Desahucio. Desahucio. Desahucio. Quizás si no fuera pobre, sabría escribir más bonito. De la sociedad del espectáculo a la realidad "visceralizada". Hablamos desde los escombros y las heridas. Se nos apodera la sección de sucesos. Ardor de estómago es el descriptivo de esta realidad hedionda. Escritura de casquería. Dame un abrazo.
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